Son bastantes los partidos que llevamos en lo que va de campaña en los que, después de que el árbitro señale el final del choque, nos queda la impresión de haber regalado un punto al contrincante de la manera más absurda. Así ocurrió de nuevo ayer, al igual que en Watford, en Sevilla o en casa el día del Everton. Teníamos al Arsenal contra las cuerdas ya en la primera mitad, en la que desperdiciamos varias ocasiones claras para sentenciar o, al menos, encarrilar en encuentro. No obstante, el tanto de Salah en el arranque de la segunda parte situaba al equipo con dos goles de ventaja, en lo que parecía una diferencia casi definitiva debido a que el oponente no daba ni una. Pero nuestra capacidad a la hora de tirar por tierra el trabajo bien hecho parece no albergar límites, por lo que en apenas seis minutos el Arsenal le daba la vuelta al marcador aprovechando una serie de errores garrafales de Gómez y de Mignolet. Finalmente, Firmino pudo rescatar un empate que deja en la comunidad social del Liverpool sensaciones demasiado amargas. Habrá que olvidarse de ello y pensar en la próxima jornada de liga, en la que recibimos al Swansea en el tradicional Boxing Day.
Once titular LFC:
Mignolet, Gómez, Lovren, Klavan, Robertson, Henderson, Can, Coutinho, Salah, Mané, Firmino
Sustituciones LFC:
Milner, Wijnaldum, Chamberlain
Goles LFC: 26'
Coutinho; 52'
Salah; 71'
Firmino
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