Tras el enésimo parón internacional, afrontamos en los próximos ocho días una serie de compromisos de gran importancia de cara al futuro inmediato del colectivo. Primero, mañana en Anfield ante el Southampton, choque que puede servir a modo de afianzador del buen momento que vivíamos en liga previo al descoloque general por culpa del fútbol de selecciones. Segundo, desplazamiento el martes a Sevilla para disputar un enfrenamiento que debería significar, o bien la clasificación rumbo a los octavos de final de la Copa de Europa, o bien el alejamiento definitivo del primer puesto del grupo y la consiguiente pelea por la segunda posición en la última jornada de la fase regular. Tercero, el siguiente fin de semana contra el Chelsea, de nuevo en liga y otra vez en Anfield. Esperemos que los chavales hayan vuelto mentalizados porque la recta final de noviembre y el cargado mes de diciembre prometen ser, como mínimo, intensos y difíciles.
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