Somos un equipo incapaz de aprovechar los saques de esquina. Es posible que sorprenda el análisis que escribo hoy, tras ganar de manera agónica al Leicester City pidiendo la hora y con sensaciones contradictorias. Pero la realidad evidencia que el Liverpool no saca ventaja casi nunca de los lanzamientos desde el córner y esto es algo que me inquieta profundamente. Desconozco la relación que tiene dicha falta de poderío ofensivo a balón parado con las complicaciones que nos plantean los rivales en jugadas de estrategia, no obstante lo que queda claro es que tales situaciones forman parte de las lagunas del colectivo, más allá de la falta de acierto puntual o de la inseguridad que los centrales generan en el encargado de cubrir la portería.
El triunfo de ayer otorga un mínimo de calma tanto a la plantilla como a los seguidores. El martes viajamos a Moscú con la obligación de cosechar los tres puntos y de demostrar que el bloque puede dar la cara en la Copa de Europa. De no lograr el triunfo, el objetivo de ser primeros de grupo empezará a desvanecerse.
Once titular LFC:
Mignolet, Gómez, Matip, Lovren, Moreno, Henderson, Can, Wijnaldum, Coutinho, Salah, Firmino
Sustituciones LFC:
Sturridge, Milner, Chamberlain
Goles LFC: 14'
Salah; 22'
Coutinho; 67'
Henderson
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