domingo, 22 de septiembre de 2013

21/09/2013: Liverpool 0-1 Southampton

Me inquietan mucho ese tipo de personas capaces de pagar un dineral por asistir a ver un partido de fútbol al estadio y que, si las cosas no salen bien, se marchan de la grada cuando todavía quedan algunos minutos por disputar. Me inquietan casi tanto como aquellos que se declaran seguidores del Liverpool pero luego animan a la par a otros equipos, incluso por encima del propio Liverpool, ahogando sus penas o sus males mientras juegan con una extraña ambigüedad. Podría dedicarme a criticar a los jugadores por el pésimo encuentro de ayer ante el Southampton, en el que no dimos una y además mostramos una falta de ideas preocupante a la hora de intentar remontar un resultado adverso, pero eso sería quedarme estancado en la simpleza del que utiliza el fútbol como vehículo para destripar sus propias miserias. Prefiero lanzar un mensaje al colectivo que abandonó Anfield antes de tiempo, ya que aunque se veía a la legua que íbamos a perder merecidamente, me parece una falta de respeto hacia el equipo y hacia todos los otros individuos que pueblan el graderío -por no hablar de los que suspiramos por poder sentarnos en una de las plazas de The Kop alguna vez- lo de salir por la puerta antes de que el árbitro pite el final. Espero y deseo que los sujetos que mostraron semejante actitud no vuelvan a pisar el estadio durante el resto de la temporada, y mucho menos que luego se suban al carro cuando las cosas nos vayan saliendo mejor.

Once titular LFC: Mignolet, Touré, Skrtel, Agger, Sakho, Lucas, Gerrard, Henderson, Aspas, Moses, Sturridge

Sustituciones LFC: Sterling, Enrique, Luis Alberto

PD: Ahora toca visitar Old Trafford entre semana para medirnos al Manchester United de nuevo, esta vez en eliminatoria de Copa de la Liga.

6 comentarios:

  1. ¿Te refieres a que animan a otros equipos cuando estos se enfrentan al Liverpool en un partido cualquiera y les llevan ventaja?

    Laura

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  2. No, me refiero a gente que dice que es seguidora del Liverpool y además lo es también de otros equipos. Te pongo por caso, imagina, un individuo que dice que es del Bayern Munich y del Liverpool, u otro que dice que es del Barcelona y del Liverpool, y que no se definen por uno en concreto o lo que es peor, dicen que el Liverpool es su "segundo" equipo.

    Comprendo que se sea de un equipo y se simpatice con otros, pero decir que se es de dos equipos por igual me resulta inquietante...

    Digo esto porque tengo constancia de que hay mucho intrusismo entre un sector de seguidores que dicen ser Reds por gente como Rafa Benítez o Fernando Torres, o porque les gusta mucho el ambiente que se genera en Anfield en determinadas fechas. Un amplio sector de, por ejemplo, aficionados del Atlético de Madrid que apoyan nuestra causa y que intentan, en ocasiones, darnos lecciones de conducta a la hora de animar o de criticar al equipo.

    Con esto no quiero decir que sea incompatible ser de un equipo, digamos, de la liga española, y simpatizar con el Liverpool, pero en lo que a mi posición respecta, prefiero a la gente comprometida al 100%, no las medias tintas y encima con pretensiones de extraña y sospechosa naturaleza.

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  3. Creo que más o menos te entiendo, pero, entonces, ¿Tú eres más del Liverpool o del Madrid? ¿Y si se enfrentasen entre ellos? ¿Cuál sería la diferencia fundamental que tú encuentras entre alguien que sea del Barcelona y del Liverpool y tú?

    ¿No será más importante disfrutar de un deporte con deportividad y apreciar el juego de varios equipos, aunque se tenga uno o más predilectos que ir a muerte con un equipo y llegar a odiar a los rivales como hacen otros?

    Que tengas buen día,

    Laura

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  4. Yo soy del Liverpool, no sigo a ningún otro equipo de fútbol.

    Mi interés por el Real Madrid se centra solamente en el plano del baloncesto, al igual que mi afición por los San Antonio Spurs.

    Y como bien digo, esto no implica no disfrutar cuando otros equipos juegan bien. Por ejemplo, el año pasado apoyaba al Borussia Dortmund en la Copa de Europa -donde fueron subcampeones- porque su filosofía de entender el fútbol cuadra mucho con la nuestra, pero no me considero ni de lejos parte de la comunidad amarilla, ni falta que me hace.

    La diferencia entre seguir a un equipo o a dos no te la puedo explicar fácilmente, es algo que considero una visión particular y que, sin más, me resulta incompatible. Creo que no se puede ser por igual de dos equipos, siempre habrá uno que te tire más, y aquellos que son del Barcelona y también del Liverpool suelen ser barcelonistas a los que les caemos bien, pero para mí no tienen la suficiente implicación con nuestro entendimiento del fútbol como para exigir o darnos lecciones a los que únicamente animamos al Liverpool.

    Este es un tema polémico que comento porque suelo ver en twitter a mucho listillo que va dando clases de apoyo al club y luego veo que lo hace de cara a la galería, que no siente el escudo al igual que otros y que prefieren ver un partido de su primer equipo -sea el que sea- olvidándose del compromiso del aficionado con los jugadores. Muchos se hacen o hicieron del Liverpool por moda, que es a lo que voy, a eso es a lo que llamo subirse al carro.

    Pero vaya, que este tema tampoco me quita el sueño...

    PD: Yo no odio a ningún equipo, eso que vaya por delante. Es más, al contrario. Respeto por igual a todos los clubes, aunque haya algunos que me caigan peor que otros. El odio en el deporte me repugna.

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  5. Todo entendido entonces...

    Yo quizás entonces vería más problema cuando la gente se pasa de lista que cuando simplemente disfruta y apoya a más de un equipo, pero ni yo soy futbolera ni tengo nada que cuestionar a tu opinión, completamente respetable y seguro que mucho más formada que la mía en este área.

    Ya sé que tú no odias a ningún equipo, era por poner un ejemplo gráfico. De hecho, porque eso sé, por eso me gusta leerte.

    Laura

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  6. Precisamente esa es mi crítica, el hecho de que la gente se pase de lista y algunos se crean más del Liverpool que nadie cuando en realidad no lo son tanto.

    Y lo que a mí me gusta que me leáis... no tiene precio.

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