Hace varios días recibí en casa la camiseta oficial del Liverpool de la presente temporada, la del 125 aniversario que tan buena acogida ha tenido entre todos los seguidores del club a nivel mundial. No pude estrenarla de peor manera: en la derrota frente al Tottenham del pasado domingo. Sin embargo, ayer el equipo se resarció y obtuvo un triunfo que, lejos de ser brillante, era más que necesario. El rival fue el Huddersfield Town, oponente que venía de derrotar al Manchester United en la jornada anterior, aspecto que generaba una cierta inquietud con justificación. La primera parte resultó desastrosa, en la línea de los últimos encuentros, con el extra de disponer de un penalti que Salah no convirtió, lo que minaba casi por completo la confianza en el triunfo. Pero gracias a un golpe de fortuna, Sturridge abría la lata en el inicio de la segunda mitad, consiguiendo encarrilar un partido que, finalmente, se concretó de un modo verdaderamente plácido.
El caso es que vi el choque con la nueva camiseta colgada de un perchero. Pensé que sería mejor esperar a que el equipo agarrase algún resultado positivo para animar a los jugadores acompañado por la recién adquirida elástica. Debido a ello, es probable que el próximo miércoles, contra el Maribor en la Copa de Europa, me atreva a usarla. Y espero que, en la línea del tanto convertido por Sturridge ante el Huddersfield Town, la suerte vuelva a estar de nuestro lado.
Once titular LFC:
Mignolet, Gómez, Matip, Klavan, Moreno, Henderson, Milner, Wijnaldum, Salah, Firmino, Sturridge
Sustituciones LFC:
Chamberlain, Can, Solanke
Goles LFC: 50'
Sturridge; 58'
Firmino; 75'
Wijnaldum
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